Rodrigo Brause, figura de Montevideo en el triunfo sobre Marne, habló con BC y dijo: ”La verdad fue un final que se sueña todos los días, poder meter la última pelota de un partido que te estás jugando la vida, que encima sea triple y foul, y tengas la oportunidad de darle la victoria y esta alegría a la gente, es soñado”
Sobre la comparación con el juego anterior manifestó: “Cambiamos mucho la mentalidad, cada pelota era una final, había que defenderla como la última de cada partido. Nos dimos cuenta que estábamos jugando muy liviano, que las falencias pasaban en defensa y por suerte pudimos ganarlo. Ajustamos con Christian Pereira que era el que más había gravitado e intentamos llegar más a los triples, sobre el final Fernández nos castigó desde afuera pero pese a eso lo pudimos llevar”
Sobre lo que se viene agregó: “Que entre esa bola es un impulso para poder dejar a Montevideo en la LUA, es una puertita que nos vamos a agarrar para poder quedarnos, y si podemos ganar el próximo partido que no va a ser nada fácil, nos quedamos ahí, a un pasito del objetivo. Son dos finales y debemos mentalizarnos en jugarlas con lo que eso implica”