Números calientes: Capítulo I
Al analizar los números de la primera final que culminó con victoria de Hebraica ante Aguada, se puede determinar algunos puntos determinantes para la victoria Macabea, y que marcan aspectos a mejorar por el lado del Aguatero. Por Juliana Dibarboure El primer rubro a analizar es el ritmo de juego, es decir, la cantidad de posesiones que tuvo cada equipo en los 40 minutos. Hebraica Macabi jugó 81 posesiones, cuando promediaba 74 en esta LUB, y Aguada lo hizo en 82, mientras que venía promediando 71. Estos números reflejan que el partido fue muy dinámico, con muchos puntos de ataque rápido y posesiones cortas. A su vez, la eficiencia ofensiva de Hebraica fue mayor que la de Aguada, obteniendo 1,10 puntos por posesión mientras que Aguada obtuvo 0,93. Ambos equipos promediaban 1,13 en la LUB. Evidentemente éste es un punto flaco del juego Aguatero, dado que tiró con peores % de cancha de lo que promediaba, y perdió muchas pelotas. En el rubro rebotes, Aguada fue mejor que Hebraica Macabi, especialmente en el rebote ofensivo tomando 40% de los rebotes que se dieron en el aro que atacaba (promedió 34;6% en Superliga). Sin embargo, no pudo aprovechar esa capacidad reboteadora en puntos, dado que tomando 18 rebotes de ataque solamente logró 10 puntos de segunda oportunidad. En la previa de las finales se habló de que el fuerte de Aguada era el juego colectivo y lo bien que pasa la bola: en este juego ese rubro fue otro ausente. Aguada promediaba 1,56 asistencias sobre pérdidas en la LUB, y en la noche del lunes pudo lograr un bajo 0,73. En este punto, Barrera y Smith, los mejores pasadores del equipo, estuvieron bastante por debajo de su promedio personal, principalmente en el caso del foráneo. Barrera logró 1,33 asistencias por cada pelota que perdió (promediaba 1,7), y Smith lo hizo en un bajísimo 0,17 (promediaba 1,6). Pero donde más sufrió el Aguatero fue en las pérdidas y los puntos de contraataque. Hebraica Macabi anotó 29 puntos de contraataque y 25 puntos desde pérdidas, cuando promediaba 14 y 18 respectivamente. Las 22 pérdidas de Aguada influyen en este rubro, porque si bien Hebraica perdió 18 pelotas, la diferencia está en que las pérdidas de Aguada fueron en gran parte en primera línea defensiva lo cual permite a Hebraica correr la cancha con facilidad.